Oh voz, única voz: todo el hueco del mar,
todo el hueco del mar no bastaría,
todo el hueco del cielo,
toda la cavidad de la hermosura
no bastaría para contenerte,
y aunque el hombre callara y este mundo se hundiera
oh majestad, tú nunca,
tú nunca cesarías de estar en todas partes,
porque te sobra el tiempo y el ser, única voz,
porque estás y no estás, y casi eres mi Dios,
y casi eres mi padre cuando estoy más oscuro.
Me dices que el silencio
ResponderEliminarestá más cerca de la paz que los poemas,
pero si como un regalo
yo te ofreciera el silencio
(porque yo sé lo que es el silencio)
tú dirías:
"ésto no es el silencio
es otro poema"
y me lo devolverías.
Leonard Cohen
El silencio, dicen, es la voz de la complicidad.
Pero el silencio es imposible.
El silencio grita.
El silencio es un mensaje,
igual que no hacer nada es un acto.
Leonard Peltier
¿Cómo es de silencioso un homenaje al silencio?
http://www.silenciopormallarme.org/silencio.php
-qué lastima, me hubiera gustado ir...-
Un besazo
El silencio puede ser la gran broma final (parafraseando a Nacho Vegas), pero sólo el silencio de la consciencia, pues nuestra propia descomposición es también bulliciosa.
ResponderEliminarAyer leí algo que me encantó. En el epitafio de Jacob Bernoulli aparece una espiral con el siguiente lema "Eadem mutato resurgo" (aunque transformado, resurjo siempre igual)
:)
Gracias por la respuesta. Me gusta todo lo que dices, y no había reparado en esa descomosición como algo ruidoso. De hecho la incineración también es un puro crepitar. Me gusta saber que podemos dejar algo parecido a una traca final.
ResponderEliminarAcabo de leer en la wikipedia sobre Bernoulli, y que por error le grabaron el lema en una espiral de arquímedes, cuando él había dejado constancia de su debilidad por la espiral logarítmica, esa "spira mirabilis" a la que le había dedicado un libro entero. Qué cosas tiene la muerte, que se mofa de los sabios con silenciosa ironía.
Un beso de ave fénix, mutatis mutandis, con las plumitas encendidas y todo. (Pero en silencio)
Pobre, verdad? Ironías de la vida.
ResponderEliminarMe alegro de que resurjas =)
Esta espera que no calma ningún verso,
ResponderEliminary que no derrota la nada silenciosa, Amor,
desnúdala para mí.
Un gris tiñe los últimos azules,
y siembra la tarde
que hoy devora una boca negra.
Después vendrán como un abanico que se abre
las llamadas estrellas.
Como bandidos vendrán, como palomas.
Parecerán un enjambre sitiador, un inmóvil
preciso,
donde nadie puede negarlas.
Pero, te diré,
no serán esta vez luces de fuegos lejanos,
aunque todo ocurrirá como siempre, allá,
aquí, es decir:
en mi pecho ardiente, desmesurado.
Tanto creces renovado en esta insaciable espera,
tanto, que no podré encontrarte
en las palabras, rotas a galopes de llamarte,
ni en los versos, quebrados como ladrillos,
ni en tu nombre devastador que resume
todo, y tanto creces,
que te abrirás paso en mis costillas con un impulso
infinito,
como si estallaras,
como si estallara todo lo que alguna vez he querido…
Te extenderás por el cielo en mis racimos de anhelos.
Y las llamarás estrellas.
Puede resultarte hermoso
otra vez,
verme en el grito al derramar este incendio
salpicando los confines,
como esquirlas que tu martillo arrebatara a mi corazón,
haciéndolo rugir en su fragua de apariencia serena.
Pero, como sea que me ames, ven pronto Amor,
el horizonte en el que esperas ver llegar esta luz explotada,
la distancia última a que aspiran mis centellas,
no son nada sin ti, y me siento morir de carne
y de tiempo.
Asombroso. La capacidad de sorprendernos es la caña!!!
ResponderEliminarEstuve fuera de casa y esta entrada tuya ha sido una gran bienvenida.
No dejes de unir palabras, POR DIOS!!!
:D